Conceptos filosóficos del masaje

- EL ARTE DE TOCAR

          Cuando hablamos de ‘tocar’, queremos decir tocar con el alma y la conciencia, y no solo con el contacto físico, que es solo el medio utilizado. Cuando trabajamos en esta terapia, lo hacemos poniendo todos nuestros sentidos en lo que hacemos a cada momento. Hay que estar y sentir con el receptor. Percibir con nuestras manos, con nuestro corazón, con los instintos, todo lo que el receptor manifiesta. Solo así podremos desarrollar la facultad de escuchar y ver con las manos, potenciando nuestra intuición natural.

        Ese aspecto de ‘estar’ con el receptor, debe nacer del corazón, de nuestros sentimientos, de nuestro deseo de amar, de ayudar incondicionalmente. Solo desde esta premisa, uno puede desarrollar el arte de tocar.

- DAR Y RECIBIR

       Es tan importante el saber ‘dar’, como el saber ‘recibir’; Digámoslo de otra manera; hay que tener una excelente predisposición para realizar el masaje, liberándonos completamente de tabúes y aspectos psico-sociales que nos bloqueen en el trabajo a desarrollar. Dar un masaje, significa entregarse por completo a lo que estamos haciendo. Y para poder recibir, uno ha de estar también completamente entregado y dejarse llevar, disolviendo los temores, miedos y demás conflictos internos que no nos dejan ser como somos, y mucho menos mostrarnos a los demás. Sentir el contacto de quién nos da el masaje, y sentirlo con gozo, es un condicionante muy importante. Solo liberándonos de esos obstáculos, que suponen la supresión de nuestros sentidos y emociones, podremos manifestar en su plenitud nuestro ser.

- LA FUERZA DEL CORAZÓN

Comprender que la solución a nuestros problemas reside en nuestro propio interior, es ya dar un gran paso adelante. Y comprender que nuestra fuerza reside en nuestro corazón, en nuestra capacidad de dar y recibir amor, es sentar las bases para una mejora en todos los campos relacionados entre si: cuerpo-mente-espíritu.

 

- TRABAJO CON LAS EMOCIONES

Comprender y trascender las emociones, es un trabajo intenso que se ha de afrontar sin miedos. Aprender a disfrutar de ellas cuando se producen, es una facultad que se puede desarrollar. Y aprender a no retenerlas, es el resultado de comprenderlas y manejarlas a nuestra voluntad.

Durante la sesión se pueden y deben manifestar muchas emociones distintas como tristeza, ansiedad, melancolía, alegría, ira, etc.

  

         - DIFERENCIACIÓN PSICOLÓGICA

                  Los sentimientos pueden ser definidos como “estados del Yo”. Las emociones y las motivaciones humanas son moderadas por el cerebro límbico.

         Teniendo en cuenta la complejidad de los sentimientos, podemos clasificarlos en cuatro grandes grupos, de menor a mayor intensidad:

1.  - sentimientos localizados o puntuales

- dolor, gusto por la comida, etc.

2. - sentimientos vitales o difusos

- excitación o depresión global, que se puede manifestar en ocasiones de manera cíclica y/o estacional.

 3. - sentimientos del Yo

- más cercanos al área cognitiva, motivados por alguna causa externa

- p.ej., estar triste por una ruptura sentimental

 4. - sentimientos transcendentes o espirituales.

- estados de plenitud, profunda comunicación con los demás.

- amor

- ecología universal

- EMOCIONES Y SENTIMIENTOS

       Las emociones pertenecen al dominio de la mente, pues es ésta la que las genera y procesa, y por lo tanto, son tan volubles como una pompa de jabón. Aparecen y desaparecen de manera veloz, y su impermanencia hace que, al tratar de aferrarnos a ellas, nos sintamos desdichados, desilusionados y en ocasiones vacíos. Las emociones no son perdurables en el tiempo.

      Utilizados en la terapia del MPS, se convierten en un excelente aliado que nos permite desbloquear zonas del cuerpo. Es por ello que se hace insistencia en la liberación de esas emociones retenidas. Al ser pasajeras, pueden liberar gran cantidad de energía bloqueada, sin tener repercusiones negativas posteriores sobre nuestros sentimientos.

      Los sentimientos pertenecen al área del corazón (no como órgano físico), y son más perdurables. Son los que poseen la facultad de la fuerza de la vida, y por ende, la potestad de poder cambiar muchas cosas dentro de nosotros, y como consecuencia, aplicarlos en nuestro entorno social.

      Estos sentimientos, generados por el corazón, son el resultado de la liberación de las emociones que nos bloqueaban. Es decir, se utilizan las emociones generadas por nuestra mente, para encender la chispa de la vida, que reside en nuestro corazón.

         Asi pues, podríamos resumir lo siguiente:

    Los sentimientos son generados por el corazón, pero se manifiestan mediante las emociones. Es decir, necesitan de nuestro cuerpo físico para poder manifestarse

 

SENTIMIENTOS y EMOCIONES

- amor - placer

- tristeza - ira

- alegría - miedo

- NECESIDADES INSTINTIVAS

Todos nosotros, en mayor o menor medida, procesamos unas necesidades instintivas que siempre buscamos poder satisfacer, pero que debido a determinados condicionantes sociales y culturales, nos son vedadas (por nosotros mismos).

Estas necesidades instintivas son generadas y almacenadas en nuestro centro motor o centro instintivo, situado tres o cuatro dedos por debajo de nuestro ombligo, en el tercer chakra.

¿Y cuales son estas necesidades instintivas?.....

·  - necesidad instintiva de supervivencia

- nos apartamos de los potenciales peligros

- tratamos de desarrollar nuestras facultades para destacar

- hacemos lo necesario para proteger a nuestra familia

·  - instinto de alimentación

- comemos y bebemos por necesidad

·  - instinto psico-emocional (curiosidad, etc.)

- los hechos y circunstancias nuevas nos llaman la atención

 - deseamos conocer cosas nuevas y experimentarlas

·          - instinto sexual

           - manifestamos la necesidad de la sexualidad como medio de procreación.

- desarrollamos nuestra sexualidad como sustento del placer

·  - necesidad instintiva del contacto (caricias, abrazos, roces, etc.)